Tragedia en Villa Crespo: una madre habría asesinado a su familia y se suicidó

La comunidad de Villa Crespo, en la Ciudad de Buenos Aires, se vio conmocionada tras el hallazgo de una familia entera sin vida dentro de su hogar. El hecho ocurrió el miércoles 21 de mayo de 2025 en un departamento de la calle Aguirre al 200.

Los fallecidos fueron identificados como Bernardo Adrián Seltzer (53), su esposa Laura Fernanda Leguizamón (50) y sus hijos Ian e Ivo, de 15 y 12 años respectivamente. La escena fue descubierta por la empleada doméstica, quien al ingresar encontró uno de los cuerpos y dio aviso inmediato a las autoridades.

La principal hipótesis apunta a que Laura Leguizamón, quien atravesaba un tratamiento psiquiátrico, habría asesinado a su familia y posteriormente se quitó la vida. En la cocina se halló una carta escrita con caligrafía irregular en la que expresaba frases como "fue mucho" y "muy perverso", revelando un estado de fuerte perturbación emocional.

Los informes forenses determinaron que Bernardo fue asesinado mientras dormía, y que los menores intentaron defenderse antes de morir. Laura fue hallada en el baño con una herida autoinfligida en el pecho.

Este hecho pone sobre la mesa un tema urgente y muchas veces invisibilizado: la salud mental. Vivimos en una sociedad que todavía arrastra prejuicios, desinformación y desidia en torno a los padecimientos mentales. A menudo, las señales de alerta son ignoradas o subestimadas, tanto por el entorno como por los propios sistemas de salud.

La atención a la salud mental no puede seguir siendo un privilegio ni un tabú. Debe ocupar un lugar central en la agenda pública y en los sistemas de contención familiar, educativa y comunitaria. Cuando una persona atraviesa una crisis y no encuentra una red de apoyo ni una atención adecuada, las consecuencias pueden ser devastadoras.

No se trata solo de prevenir tragedias como esta. Se trata de garantizar el derecho básico a vivir con dignidad, con acompañamiento profesional, con escucha y contención. Porque detrás de cada caso hay historias, hay dolor acumulado, hay personas que podrían haberse salvado si la salud mental fuera tratada con la seriedad que merece.